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Las Lecturas de Hoy
Pasé doce años en el seminario antes de que fui ordenado como sacerdote. A través de los primeros ocho años, mi único objetivo era llegar a las clases de teología porque quería entrar en las profundidades del conocimiento acerca de Dios. Me sumergí en la teología con la emoción de un niño de dos años de edad, a punto de saltar en un charco. Pero un charco sólo no es tan profundo, ¿no? Así es como me sentí con la teología también. El mejor de mis profesores de teología a menudo terminaba la clase con la línea, "Es un misterio." Si yo escuchaba esa declaración una vez más iba a gritar. Veintiún años más tarde, hoy en día, cuando las personas me hacen preguntas acerca de Dios, les digo lo que me dijeron cuando yo era joven, "Es un misterio". Hoy celebramos la fiesta de la Santísima Trinidad. A pesar de como empecé esta homilía, déjenme darles una advertencia, yo podría terminar esta homilía diciendo: "Es todo un misterio." Pero eso no es donde quiero empezar. Quiero empezar con lo que sabemos acerca de Dios. Permítanme comenzar con preguntas retóricas de Moisés a los israelitas en la primera lectura de hoy. Moisés le pregunta: "¿Se oyó algo semejante? ¿Qué pueblo ha oído sin perecer, que Dios le hable desde el fuego, como tú lo has oído? ¿Hubo algún Dios que haya ido a buscarse un pueblo en medio de otro pueblo, a fuerza de pruebas, de milagros y de guerras, con mano fuerte y brazos poderosos?" La respuesta de Moisés fue : "Dios está cerca de nosotros y nos habla. Dios cuida de nosotros y nos salva. " Moisés sabe que esto es absolutamente cierto acerca de Dios. Con o sin la teología, cada uno de nosotros tiene algún conocimiento acerca de Dios. Para mí, personalmente, Dios es amor puro. Cada vez que veo un crucifijo, estoy sorprendido por el amor que Dios tiene para nosotros. Pero aquí está el truco: Incluso con tanta claridad como un crucifijo me habla de que Dios es amor y con tanta claridad lo entiendo, el misterio nunca cesa. Dios es mucho más de lo que incluso un crucifijo puede decirnos. Tratar de explicar con lo que sabemos acerca de Dios y lo que es todavía un misterio, tengo tres puntos para que reflexionemos: 1. Moisés no tenía una Biblia en sus manos cuando habló acerca de Dios. Su conocimiento se basaba en su encuentro personal con un Dios que quería establecer un pueblo libre. Porque Moisés experimentó la cercanía de Dios, él fue capaz de hablar de un Dios cercano. En la lectura del Evangelio, Mateo se refiere a esta cercanía, cuando Jesús dice: "Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo" Mt 28:20). Mateo no tenía una Biblia en sus manos tampoco. Pero él experimentó a Jesús personalmente. Así que quiero preguntarle, "¿Que conoces acerca de Dios?" Tal vez su conocimiento viene de la Biblia o de lo que otra persona habia compartido con usted. Sin embargo, ¿cómo ha vivido su Dios. ¿Cómo entiende a Dios? De su propia experiencia de Dios, ¿qué es lo que, sin duda, conoce de Dios? Si su hijo o un no creyente le pregunta acerca de Dios, ¿qué le responderías? 2. El elemento absolutamente sorprendente en la fiesta de hoy es que nuestro esfuerzo por conocerle a Dios no sólo revela quién es Dios; también nos revela quienes somos. En la segunda lectura de hoy, Pablo dice: "Porque los que son guiados por el Espíritu de Dios son hijos de Dios" (Romanos 8:14). El hecho de que somos hijos de Dios solamente se revela porque conocemos a Dios como Padre, Hijo y Espíritu Santo. Creo que cuanto más nos acercamos a la experiencia y conocemos a Dios es cuanto más llegamos a conocernos a nosotros mismos. De hecho, es sólo en nuestra relación con Dios, que conocemos lo que realmente somos. Aquí hay algunas preguntas que podemos hacernos sobre nosotros mismos: ¿Qué sé de mí mismo? ¿Qué hay en mí que yo creo que es verdad? ¿Cuál es mi identidad? ¿Cómo está mi identidad conectado a lo que sé acerca de Dios? Mi respuesta personal a esta pregunta es el discipulado. Mi relación con Dios está viva en mi discipulado cristiano. Creo que una vida con sentido es una vida en la que mi conocimiento acerca de Dios se obtiene cómo yo me percibo a mí mismo. 3. En la fiesta de la Santísima Trinidad, a continuación, tenemos dos cosas: lo que creemos acerca de Dios y lo que creemos sobre nosotros mismos en relación con Dios. Y entonces, Jesús nos da un mandato indiscutible en la lectura del evangelio de hoy. "Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado." (Mt 28:19) . La palabra para esto es la evangelización. Pablo le dice el verdadero significado de la evangelización: que nosotros revelamos a Dios y quiénes somos en relación de Dios. En este sentido, Jesús es el evangelizador por excelencia. Jesús nos revela a Dios como Trinidad. Podemos creer que Dios es Padre porque Jesús vivió como el Hijo. Podemos creer en el Espíritu, porque Jesús dio el Espíritu para nosotros. Nos convertimos en evangelizadores cuando nuestras vidas se vuelven como la vida de Jesús. Cuando celebramos la fiesta de la Trinidad estamos diciendo que esa iglesia ha experimentado a Dios como Padre, como Hijo y como el Espíritu Santo. Pero la Iglesia también sabe quién es causa de lo que sabe acerca de Dios. Ella vive con mayor intensidad cuando celebra la Eucaristía. Aquí en esta mesa, Dios envía al Espíritu Santo para que el pan y el vino se conviertan en el cuerpo y la sangre de Cristo. Debido a esto la Iglesia se llama el cuerpo de Cristo. La iglesia debe ser ahora la Trinidad en el mundo. Así, termino como empecé esta homilía - este es un gran misterio! -Padre Satish Joseph
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Este Sábado, el 23 de mayo, un día antes de Pentecostés, el arzobispo salvadoreño Oscar Romero fue beatificado. Romero fue el arzobispo de San Salvador en un momento en que había opresión económica generalizada y violaciones brutales de los derechos humanos. Romero lanzó su peso detrás de los que sufrían. Fue una de las figuras más destacadas de la revolución. Él escribió en su libro, La violencia del amor: "Para la iglesia, los muchos abusos de la vida humana, la libertad y la dignidad son un sufrimiento sincero. Como defensor sagrado de los derechos de Dios y de sus imágenes, la iglesia tiene que gritar." Y él hizo exactamente eso. Como resultado, el arzobispo Romero fue asesinado en el altar mientras levantaba el cáliz en la consagración. Una vez, Romero fue un revolucionario pacífico y no violento. Hoy él es un beato!
Hoy celebramos la fiesta de Pentecostés. Pienso en el día de Pentecostés como una revolución pacífica. Cada celebración del Pentecostés es también una invitación para nosotros para unirnos a la revolución pacífica. Pentecostés cambió el curso de la vida de los discípulos y la iglesia primitiva. Cada celebración del Pentecostés puede hacer lo mismo con nosotros. Estoy proponiendo tres formas en las que puede participar en la revolución de pentecostés. 1. Permitir una Revolución por dentro. En la lectura del Evangelio de hoy, Jesús dice a sus discípulos: "Recibid el Espíritu Santo." A partir de la comienzo de la creación, cada vez que el Espíritu de Dios se ha dado a la gente, habia cambios revolucionarios. La creación misma es una obra del Espíritu. Más tarde durante la creación, Dios sopló en la nariz del primer hombre y mujer, y surgió la vida humana. En la Anunciación, María recibió el Espíritu Santo y la Palabra se hizo carne. Jesús comenzó su ministerio revolucionario de amor después de su bautismo en el río Jordán. Sabemos lo que su ministerio hizo al mundo. En Pentecostés la Iglesia cristiana primitiva recibió el Espíritu Santo y cambió el curso de la historia humana. Antes del Concilio Vaticano II, el Papa Juan XXIII abrió las ventanas de San Pedro y oró por el poder del Espíritu Santo para llenar la Iglesia - y el resto es historia. Oscar Romero se convirtió en una parte de esta misma revolución. Hoy en día, el Espíritu Santo descienda sobre cada uno de nosotros de una manera nueva. Pablo nos dice en la segunda lectura, que el Espíritu viene en nuestra ayuda e intercede por nosotros. Dejemos que el Espíritu Santo haga para nosotros lo que el Espíritu hizo en aquel primer Pentecostés. Mantengamos nuestro corazón abiertos para que haya una revolución en nuestros propios corazones. Ven Espíritu Santo. 2. Una revolución silenciosa. En mi homilía de la semana pasada, mencioné los últimos datos del Pew Research Center que sugiere que el porcentaje de adultos que describen a sí mismos como cristianos ha disminuido de 78,4% en 2007 al 70,6% en 2014. Se trata de datos muy preocupantes. Qué podemos hacer? Mi sugerencia es que nosotros creemos nuestra propia revolución silenciosa. Le voy a dar un ejemplo. Nuestro tema de la parroquia este año es "El discipulado:. El encuentro diario con Cristo" Durante este año, se invitó a los feligreses a compartir cómo han encontrado a Cristo en su vida cotidiana. Aquí está una de las respuestas que recibimos: "En el retiro parroquial, todos recibimos pulseras que llevan la cruz de Jerusalén. Lo hice una de mis metas para usarlo todos los días hasta el próximo retiro como una manera para ayudarme a ser siempre consciente de ser un discípulo y mantener los ojos, los oídos y el corazón abiertos para el encuentro con Cristo. Fue una buena manera para mí recordar que el ser un discípulo es una opción - ya sea a usarlo o dejarla a un lado. Encontré que el brazalete es un desafío positivo para mí para elegir ser un discípulo cada vez que sentía la necesidad de quitármelo. Otro aspecto positivo fue que me permitió poner mi fe en mi "muñeca", como la gente mira la pulsera de la manga de la camisa o ver al lado de mi reloj mientras corro, y abría una conversación entre nosotros acerca de la fe. El otro dia, yo estaba ayudando a una mujer a cargar un aparato de aire acondicionado en su carro , mientras lo hacía el hilo que sostenía la cruz en la pulsera se habia soltado . En lugar de estar molesto, la situación me hizo pensar en cómo Cristo se sacrificó para ayudarnos. Cristo se rompió a sí mismo para hacer que nuestros heridas sean curados, y El se rompe continuamente a sí mismo en la Eucaristía para nosotros. Mi pulsera podría haberse roto en cualquier otro momento, en cualquier otra circunstancia, pero me alegro que se haya roto en el momento de estar ayudando a alguien cuyo nombre nunca lo sabré; y es mi esperanza que ese acto de ayuda ofrezca un acto de bondad a otra persona. Por ahora el medallón está puesto en la cosa que siempre llevo conmigo :con mis llaves. Aunque no literalmente en mí, va a permanecer para servir como un recordatorio para mí estar continuamente un seguidor de Cristo ". Esta historia es un ejemplo a lo que me refiero como una "revolución silenciosa". Pentecostés es una invitación a continuar la revolución del Espíritu Santo en formas sencillas y silenciosas. Es posible hacer que Cristo sea atractivo para los demás de manera humilde. Podemos invertir los datos preocupantes emulando la historia de éste feligrés. 3. Una revolución más amplia. En la lectura del evangelio, Jesús ofrece a sus discípulos la paz mientras sopla en ellos el Espíritu Santo. Nosotros necesitamos un poco de paz en estos días. En nuestra nación mismo, hemos visto una buena cantidad de falta de armonía racial y económica en los últimos tiempos. Es increíble que hoy en dia haya todavía racismo. Nuestra Misa multicultural es un testigo revolucionario a la unidad que se exhibió en aquel primer Pentecostés. Las barreras se rompieron, las personas entendieron los unos a otros a pesar de que hablaban diferentes idiomas, la confusión fue reemplazada por la unidad, y la buena noticia de Jesucristo se proclamó sin temor. Hoy, en esta misa estamos dando testimonio de la unidad que puede existir entre los diversos pueblos. En nuestro mundo lleno de peleas, es posible mirar más profundamente que el color de nuestra piel, más profundamente que los diversos idiomas que hablamos, para arrojar los prejuicios, a reunirse en un lugar sin prejuicios, para adorar al mismo Dios de diversas maneras, y amarnos unos a otros. La invitación de hoy, es tomar la belleza de esta celebración con el mundo exterior. Me parece que un Pentecostés puede superar la falta de armonía en nuestra sociedad. Que nosotros hablemos el idioma que reunió a todos los pueblos a la comprensión, la unidad y la paz. -Padre Satish Joseph la Ascensión del SeñorLecturas del dia Hay algunos datos nuevos que deben ser preocupante para muchos de nosotros. El Centro de Investigación de Pew hizo una encuesta que dijo que el porcentaje de adultos que se describen a sí mismos como cristianos ha disminuido de 78,4% en 2007 al 70,6% en 2014. En el mismo período, el porcentaje de estadounidenses que no están religiosamente afiliado - que se describen a sí mismos como ateo, agnóstico o " nada en particular "- ha saltado más de seis puntos, de 16,1% a 22,8%. La caída en la proporción de la población cristiana se observa principalmente entre los protestantes de la línea principal y los católicos. La cuota protestante evangélico de la población de Estados Unidos también ha bajado, pero a un ritmo más lento, cayendo en alrededor de un punto porcentual desde 2007. ¿Qué vamos a hacer con esta información? ¿Quién tiene la culpa? No estoy seguro acerca de la respuesta a esta pregunta. Todo lo que puedo hacer es preguntarme a mí mismo si la forma en que vivo mi fe en Cristo es ejemplar o no. Ojala que por mi influencia, Cristo sea atractivo para otras personas. Hoy, en lugar de centrarme en la ascensión real de Jesús al cielo, me gustaría centrarme en la clase de cristianos que pide Jesus que sean sus discípulos en el momento de la ascensión. Me gustaría utilizar la segunda lectura para dibujar más este punto. Pablo escribe a los Efesios, “Pido al Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, que les conceda espíritu de sabiduría y de revelación para conocerlo. Le pido que los ojos de sus corazones sean iluminados para que comprendan cuál es la esperanza que les da su llamamiento, cuán gloriosa y rica es la herencia que Dios da a los que son suyos y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para con nosotros, los que confiamos en él, por la eficacia de su fuerza poderosa…” Pablo espera por tres cosas para los cristianos: en primer lugar, que tienen "un espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo a él [Cristo] (Efesios 1:17). En segundo lugar, que los "Le pido que los ojos de sus corazones sean iluminados para que comprendan cuál es la esperanza que les da su llamamiento” (Efesios 1:18). En tercer lugar, que conozcan "la extraordinaria grandeza de su poder [de Cristo]" (Efesios 1:19). Me gustaría centrarme en estas tres palabras - el conocimiento, el corazón y el poder - porque estas tres palabras son la clave de la vida cristiana después de la ascensión. a) "Que Dios os dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo a él (Efesios 1:17). Pablo ora para que los Efesios tengan "conocimiento de Dios." ¿Qué quiere decir Pablo con "conocimiento?" El conocimiento, para Pablo, no es mera conciencia como somos conscientes de las noticias del día. El conocimiento, para Pablo, significa fuerte convicción de la mente. Es como nuestra convicción de que habrá un mañana. Es como nuestra convicción de que 2 + 2 = 4. No podemos ser un apasionado de estas cosas, pero estamos seguros de tener la convicción absoluta. Como estamos convencidos de estas cosas, Pablo espera que estemos convencidos de las cosas divinas - que Dios es amor; que Cristo está vivo; que Cristo vive en cada uno de nosotros; que la Eucaristía es la presencia real de Jesús. La pregunta que podemos hacernos es simplemente esto - es mi convicción acerca de Cristo obvio para la gente? b) "Que los ojos de (su) corazón sean iluminados ..." (Efesios 1:18). En segundo lugar, Pablo nos lleva desde la mente al corazón. En otras palabras, Pablo espera que las convicciones de fe de la mente se convierten en una pasión en nuestros corazones. Una cosa es estar convencidos de que 2 + 2 = 4, pero otra muy distinta es estar convencido y apasionado de ella. Si los católicos en Dayton estuvieran tan convencidos y apasionados por Cristo, como estan por el equipo de football americano de los Ohio State Buckeyes, Dayton sería como el cielo. En otras palabras, Pablo estaba diciendo a los Efesios que no es suficiente con tener el conocimiento de Cristo, sino más bien, su convicción tanto a convertirse en una pasión por Cristo. Tenga en cuenta que Pablo no estaba pidiendo a sus lectores a ser un apasionado de un montón de enseñanzas y doctrinas. La persona de Cristo - su vida, su mensaje, su muerte y su resurrección - que es lo en que se centra Pablo. Esto me hace recordar a la centralidad de Cristo en los escritos del Papa Francisco. En su primera carta apostólica, invita a todos los cristianos a "encontrar a Cristo todos los días." En otras palabras, la pasión en nuestros corazones viene de fuertes convicciones de fe y nuestras convicciones de fe nos puso en el fuego por la buena nueva de Cristo. c) Que conozcas "la extraordinaria grandeza de su poder" (Efesios 1:19). Pablo añade una tercera dimensión a su cargo la fe Pascual - el poder. En otras palabras, estaba diciendo que el poder es el resultado de nuestras convicciones de fe y pasión. La Escritura nos dice que después de la resurrección de Jesús, los discípulos todavía estaban temerosos y sin poder. Las dudas, incertidumbres y temores se plegaban a sus vidas. En la ascensión, al ver a Jesús apartarse de ellos, sus convicciones de fe comenzaron fortalecerse y en Pentecostés sus corazones fueron incendiados. Ahora se sentían facultados! Se fueron con el poder para proclamar la buena noticia. Por desgracia, el poder tiene una connotación muy violento en nuestros días. El poder de Cristo yacía en su amor, la misericordia, y la apertura a todos. Durante los primeros trescientos años después de la resurrección, no hay una cuenta registrada de los cristianos cometian violencia, incluso cuando fueron víctimas de la violencia. Sin embargo, ellos estaban llenos de poder. Ayer, el hombre que habia bombardeado a Boston Dzhokhar Tsarnaev recibió la pena de muerte. ¿Hubiera hecho Cristo lo mismo? En mi opinión, pudo haber sido justo pero no la misericordia. Quiero terminar mi tercer punto con una cita del Papa Francisco, cuando declaraba al próximo año como un Jubileo de la Misericordia. Él dice: "La misericordia es el fundamento mismo de la vida de la Iglesia. Toda su actividad pastoral debe ser atrapada en la ternura que muestra a los creyentes; nada en su predicación y en su testimonio ante el mundo puede faltar en misericordia. La credibilidad misma de la Iglesia se ve en la forma en que ella muestra el amor misericordioso y compasivo. La Iglesia "tiene un deseo infinito de misericordia". Tal vez hemos olvidado lo mucho que mostrar y vivir el camino de la misericordia." (Misericodiae Vultus, 10) Es mi convicción de que es el uso de poder como Cristo que atraiga a la gente al cristianismo. La arrogancia, la justicia propia y juzgamiento deben dar paso al amor, la misericordia y la comprensión. -Padre Satish Joseph Las lecturas de hoy
(Déjenme aclarar la homilía diciendo que con las historias que voy a compartir no pretendo poner entre uds algo negativo. Yo respeto a cada persona y donde se encuentran en un determinados momentos de sus vidas. Estoy compartiendo estas historias con inmenso respeto por aquellos). Yo voy a compartir dos historias con ustedes. La primera historia es sobre un paciente en el hospital de los enfermos a quien ungí el domingo pasado. Él tiene alrededor de ochenta años de edad. Cuando me presenté a él, parecía aliviado. Una de las primeras cosas que me dijo fue: "Padre, me alegro de que usted está aquí. No he ido a la iglesia en treinta, cuarenta, cincuenta años. No tengo ninguna razón para ello. Simplemente no lo hice. Si pudiera volver en el tiempo, me iría. "Traté de consolarlo y le hice saber que el amor de Dios es mayor que nuestra debilidad. Él me creyo. Pero entonces, me dijo algo que llamó mi atención. Él dijo: "Cuando salga de aquí, vamos a vernos en la iglesia. Te prometo que voy a estar en la iglesia todos los domingos, si puedo." Por supuesto, en mi mente me preguntaba si sabía que estaba en un hospicio y tenía muy poco tiempo de vida. Realmente oré que pudiera recuperarse y al menos ser capaz de ir a la iglesia al menos una vez. La cuestión más importante en mi mente fue, Es qué de lo que tenía que darse cuenta de lo que siempre debía haber hecho? Para hacer frente a la muerte con remordimientos - Realmente no es un buen lugar para estar! Mi segunda historia es sobre uno de los dos jóvenes que visité en la cárcel la semana pasada. Ha sido encarcelado por cerca de dos meses y está mirando a una larga pena de prisión. Hablé con él por una buena media hora. Él está verdaderamente arrepentido de sus acciones. Lo encontré sinceramente tratando de establecer a sí mismo en el camino de la curación. Él me dijo: "Padre me alegro de estar en la cárcel, porque sino, yo estaría muerto. Ahora que me encuentro en la cárcel, me estoy poniendo más cerca de Dios." Él dijo: "Estoy rodeado de todos tipos de delincuentes. No puedo creer que yo tenía que llegar a la cárcel para estar cerca de Dios." Yo había tratado de ayudar a este joven antes y por lo que me dijo: "Me hubiera gustado haberlo escuchado, Padre. Pero no me arrepiento. Yo sé que Dios tiene un plan para mí. Cuando salga de la cárcel, realmente quiero hacer el bien en el mundo. " Podemos extraer algunas lecciones muy importantes de las historias de estos hombres. Sobre la base de estas historias y las lecturas de hoy, permítanme ofrecer tres implicaciones prácticas.
2. Dios es amor. Es fácil para nosotros pensar en ese hombre moribundo, el hombre en la cárcel y el hombre en el avión defectuoso, y decirles a ellos, “Claro!!!” La fe, la espiritualidad, la adoración - es realmente tan difícil? A veces, creo, que lo hacemos difícil. Estoy proponiendo que la simplicidad es la clave. La lectura de hoy nos dice que "Dios es amor.” Y realmente, es tan simple como eso. Jesús nos llama amigos. La invitación de Jesús es muy simple: "Ama a los otros como yo los amo." Así de simple es., la religión es una celebración a Dios que es amor. La oración es la respiración en el amor vivificante de Dios. La caridad es una forma de expresar el amor de Dios como un pintor expresa con colores. La adoración es un culto al "amor" indescriptible. Cuando nos olvidamos de que la fe es ante todo acerca de una persona; cuando la fe se limita a las doctrinas y rituales; cuando nos involucramos en actividades religiosas más por miedo en lugar de amor - es cuando se pierde la sencillez de nuestra fe. Si podemos comprender la simplicidad absoluta de Dios y el amor de Dios, entonces la práctica de nuestra fe se convierte en un privilegio en lugar de una tarea. Realmente no es tan difícil. La lectura de hoy nos invitan a descubrir primero al Dios del amor y luego de convertirnos en instrumentos de ese amor. Es tan simple como eso. 3. Hoy es día de la madre. Déjenme decirles acerca de mi madre. Ella es apenas 1 metro y medio de altura. Ella no asistió la universidad y trabajó como empleada en una oficina del gobierno durante 35 años. Ella cocinaba tres comidas cada día para mi padre y sus dos hijos. Ella daba todo su salario a mi padre y nunca preguntó sobre cómo se gastó. Ella tenía muy pocas necesidades. Ella es la madre más cariñosa que yo he conocido. Ella ama libremente, da libremente y cuida libremente. Ella es amante de la paz, es humilde y sobre todo sencilla. Yo amo a mi madre porque ella es una mujer sencilla. Simplemente dije, le amo y adoro a mi madre. Para mí, mi madre es la manera en que Dios me dice: "Te amo." De hecho, creo que la simplicidad de mi madre es una ventana a la simplicidad de Dios. Dios hizo a la madre para hacernos saber que Dios es amor. A mi madre y a todas las madres presentes aquí, Feliz día de la Madre. Que esta Eucaristía nos ayude a experimentar el amor de Dios y a su vez poner el amor de Dios al alcance de todos. Amén.  Quinto domingo de la Pascua 2015
Las Lecturas del Dia Hay una historia que mi maestra de segundo grado nos habia contado en mi clase de catecismo. Extrañamente, todavía me acuerdo de la historia al leer la lectura de hoy. Un día, Miguel Ángel caminando por un jardín en Florencia, vio un bloque de mármol en una esquina que sobresalia de la tierra. Estaba medio cubierto por la hierba y el barro. Se detuvo de repente, como si hubiera visto a alguien. Entonces dijo a sus amigos que estaban con él,: "Un ángel está encarcelado en el mármol; yo le debo sacarle a la libertad." Y, armado con un cincel, comenzó a trabajar en ese bloque hasta que surgió la figura de un ángel hermoso. La maestra nos decía: "Cada uno de nosotros somos un ángel en bruto. Y Dios es el artista. El cincel es la Palabra de Dios. Dios usa su palabra para sacar lo mejor de nosotros." Más tarde, cuando llegue a ser grande verifiqué la verdad de la historia de Miguel Ángel. Resulta que mi maestra decía la verdad. El ángel se encuentra ahora en la Basílica de Santo Domingo en Bolonia, Italia. A medida que la temporada de la Pascua continúa, hay dos movimientos reconocibles que somos conscientes. En primer lugar, durante tres domingos después de la Pascua hemos escuchado historias de la aparición física de Jesús a sus discípulos. Ahora a medida que avanzamos en el quinto domingo después de Pascua, el énfasis cambia a la presencia morando en Cristo. Por eso Jesús dice: "Permaneced en mí, como yo permanezco en ustedes." En segundo lugar, hay un cambio visible en la madurez de los discípulos. Veremos a unos discípulos que están más convencidos de la misión de Jesús y quienes lo proclaman sin temor. Pero si tienen que permanecer de esa manera, necesitan mantenerse unidos a Jesús. Por eso Jesús dice: "Así como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí" Para nosotros esto significa que así como una creacion de Miguel Ángel increíble, Dios está constantemente tratando de crearnos de nuevo. Especialmente, en esta temporada después de la Pascua, Cristo estará presente en el mundo a través de nosotros. Permítanme ofrecer tres implicaciones prácticas de estas lecturas.
2. Formando Discípulos. Cuando Miguel Ángel vio el bloque de mármol, vio dentro de este bloque de mármol, un ángel. Él utilizó sus instrumentos para cincelar la imagen que vio. Del mismo modo, las tres formas en que Cristo está presente para nosotros también está destinado a crearnos de nuevo. ¿Qué ve Cristo en nosotros? ¿Quién quiere Cristo que seamos? La respuesta se encuentra en la última frase del evangelio de hoy. Jesús dice: "En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis mis discípulos." Discípulos! Eso es lo que estamos destinados a ser. Si al final de nuestras vidas tenemos éxito en permitir que Dios nos pode y nos forme en auténticos discípulos, entonces nuestras vidas valdrán la pena. Como parece un discípulo? La mejor respuesta a esta pregunta esta en las Bienaventuranzas. Para el final de nuestras vidas debemos permitir que Dios nos haga pobres de espíritu, mansos de corazón, los que tienen hambre y sed de justicia, misericordiosos, pacificadores y limpios de corazón. Realmente hablando, entonces, el discipulado es sobre la formación del carácter. Hoy estamos siendo invitados a dejar que Dios nos transforme en el tipo de personas que Dios quiere que seamos. La mayor tragedia sería que volvemos a Dios al margen de la renovación y la recreación de la gracia de Dios. La mayor tragedia sería que al final de nuestras vidas hayamos profesados a Cristo sin darnos cuenta de nuestra llamada más básica - el llamado a ser discípulos de Jesucristo. 3. El camino hacia el discipulado. Aquellos de ustedes que son padres o aquellos de nosotros que somos educadores, una de las lecciones que enseñamos a nuestros hijos y alumnos es la enormidad de la tarea de la formación del carácter. Muchas veces, incluso después de haber dado el mejor ejemplo, los niños no salen como padres o maestros esperan. Jesús pasó tres años con sus seguidores para formarles en discípulos. Según la historia, no fue una tarea fácil. Tal vez nuestra historia sea la misma. Para permitir que la palabra de Dios nos pode - no es tarea fácil. Para podar nuestro egocentrismo, para mantener nuestra mente y corazón puros, para ser constructores de paz, para dar hasta que duela, y de buscar la justicia, no es tarea fácil. Del mismo modo, para estar constantemente abierto al Espíritu Santo - requiere disciplina en la oración. Para recibir el Cuerpo de Cristo y después de convertirse en el cuerpo de Cristo, se requiere compromiso, dedicación y sacrificio. Las lecturas de hoy son una invitación para que la Palabra de Dios, el Espíritu Santo y la Eucaristía formen nuestro carácter. Al celebrar esta Eucaristía nos damos cuenta de que Cristo esta presente para nosotros en sus tres formas. La Palabra de Dios acaba de ser proclamada. Muy pronto el Espíritu Santo va a transformar el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo. Y ahí estaremos a su vez transformados en el cuerpo de Cristo. Que nosotros permitamos que Cristo permanezca en nosotros y permaneceremos en él. Amén. -Padre Satish Joseph |
AuthorAqui estan las homilias del Padre Satish de cada domingo. Archives
November 2022
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