2 de diciembre de 2018 - Adviento: Un Estacion deL Amor Radical

I Domingo de Adviento
Lecturas del Dia
Una amiga mía me contó su experiencia en las tiendas del Black Friday. Una madre estaba parada en la fila de salida. Sus dos hijitos le estaban haciendo la vida imposible . Mi amiga, que también estaba en la fila, decidió ayudarla. Señaló hacia la cámara de seguridad y les dijo a los niños: "¡Santa te está mirando desde allí!" ¡Los ojos de los niños se agrandaron y se detuvieron en seco! desde ese momento terminó el problema para la mama .Cuando escuchamos una lectura del evangelio como la que leemos hoy, eso nos hace como niños asustados. En un momento u otro, cada generación ha experimentado eventos que los hacen sentir que es el fin del mundo. Piensen en la Gran Plaga, las Grandes Guerras, o el 9/11. Sin embargo, aquí estamos. Hoy, no quiero apuntar a alguna cámara cósmica y asustarlos a la sumisión. Esa no fue la intención original de los pasajes apocalípticos en primer lugar. En lugar de debatir los tiempos finales, propongo que nos enfoquemos en la segunda lectura. Esta lectura nos da tres maneras de hacer que nuestro Adviento sea significativo. Aquí están mis tres puntos:   

a) Abundar en amor unos por otros y por todos (1Tes 3:12). Me encanta la frase: “¡Abunde en el amor!”. Dice más que simplemente “amarse unos a otros” o “amar a sus enemigos”. Dice que debemos rebosar de amor. Dice que debe haber abundancia de amor. Además, dice: “aumenta y abunda en amor el uno por el otro y por todos”. En estos días en particular, existe la tentación de amar a las personas solo de nuestro tipo, solo de nuestro país, o solo de nuestra religión. En Navidad, Jesús no vino solo para Israel. En navidad, Cristo abrazó al mundo. Este Adviento, nosotros también debemos hacer lo mismo. Abundarnos en amor unos por otros y por todos.  
b) Sé irreprensible en la santidad ante nuestro Dios (1 Tes. 3:13). Si hay algo que sabemos acerca de Dios, es que Dios es santo. Luchar por ser santo ante Dios, que es todo santo, es una exigencia bastante alta. En el Antiguo Testamento, la santidad consiste en cumplir las leyes y los mandamientos. Jesús dio un estándar totalmente nuevo. Dijo que hay dos mandamientos mediante los cuales podemos cumplir todas las leyes: el amor total, sin compromisos, radical de Dios y el amor total, sin compromisos, radical a nuestro prójimo. Si este Adviento no amamos a Dios un poco más radicalmente, y si no abrazamos el amor radical al prójimo, entonces, creo que habremos desperdiciado otro Adviento. La única manera de ser irreprensibles ante nuestro Dios es el amor radical.  
c) Condúzcase para agradar a Dios (1 Tes. 4: 1). Una vez más, comportarnos de una manera que agrademos a Dios es una tarea difícil. A veces, no importa Dios, es difícil para mí complacer mis propias expectativas. ¿Cómo podemos comportarnos para agradar a Dios? La respuesta es Jesús. La vida de Jesús es un modelo para nosotros. En todas las cosas tenemos que hacernos sólo tres preguntas. ¿Cómo pensaría Jesús? ¿Cómo hablaría Jesús? ¿Cómo actuaría Jesús? Si pensamos, hablamos y actuamos como Jesús todo el Adviento, algo milagroso sucederá - esta Navidad. No solo celebraremos el nacimiento de Jesús, sino que, Jesús nacerá de nuevo a través de nosotros. Será verdaderamente la Navidad.

-Padre Satish Joseph