17 de mayo de 2020 - Amor ES Presencia

VI Domingo de Pascua
Lecturas del dia
Cada crisis saca lo mejor o lo peor de las personas. Cada crisis también saca a las mejores personas y a las peores personas. Y estamos viendo estos dos tipos durante estos días de la pandemia. Así es como lo veo: si esta pandemia no nos ha convertido en personas más amorosas, entonces tal vez hayamos perdido una gran oportunidad. 
La lectura del evangelio de hoy de Juan se centra en el amor. Esta sección del Evangelio de Juan se mantiene unida por cuatro declaraciones sobre los frutos de amar o no amar a Jesús (14:15, 21, 23, 24).

• "Si me aman, guardarán mis mandamientos ..., y pediré a mi padre para que les dé a otro paraclito para que esté siempre con uds" (15).
• "Quien tiene mis mandamientos y los observa es el que me ama" (21).
• "El que me ama cumplirá mi palabra" (23).
• "El que no me ama no guarda mis palabras" (24). 

Mientras nos preparamos para la fiesta del próximo domingo de Pentecostés, reflexionemos brevemente sobre los mandamientos de Jesús y los frutos de amarlo o no amarlo.

1. "El espíritu de la verdad". Uno de los frutos del amor de Jesús es que le pedirá al Padre que les dé a sus discípulos "otro Paráclito". Este paraclito estará con los discípulos para siempre. Es este Paraclito siempre permanente el que diferenciará a los discípulos del mundo. El mundo no puede recibir al Abogado porque el Abogado es el Espíritu de la Verdad. La primera lectura de hoy nos da un gran ejemplo de las acciones del Espíritu a la Verdad contra el mundo. Felipe bajó a la ciudad de Samaria. Aquellos de nosotros que conocemos incluso la historia básica del Evangelio conocemos la enemistad entre los judíos y los samaritanos. Sin embargo, el Espíritu de la Verdad llevó a Felipe a Samaria. Samaria fue el primer límite étnico y geográfico roto en el mundo posterior a la resurrección y posterior a Pentecostés. El movimiento del Espíritu de la Verdad está en la dirección opuesta del mundo. Donde el mundo crea desunión, discordia y odio, el Espíritu de la Verdad crea unidad, comprensión y amor. Esto se debe a que el Espíritu de la Verdad es el Espíritu del Amor. 
   

A medida que se desarrolla la crisis de esta pandemia, han surgido dos tipos de personas: los que son guiados por el Espíritu de la Verdad y los que son guiados por el mundo. Los liderados por el mundo se centran en la desunión, la discordia, la diferencia, la otredad, el odio. Aquellos que son guiados por el Espíritu de la Verdad, por otro lado, se centran en la comprensión, la unidad y el amor. 
2. "No los dejaré huérfanos". Jesús promete no dejar a sus discípulos desolados. Él promete venir y permanecer en una presencia interminable con sus discípulos que lo aman y guardan sus mandamientos. ¿Cómo entendemos esta interminable presencia de Jesús? Como dice Jesús, Él está presente para nosotros como una presencia interna y externa. Por supuesto, nuestra mente se dirige inmediatamente a la Eucaristía, que es la presencia tangible de Cristo, y a la presencia interior a través del Espíritu Santo. Pero más que de cualquier otra manera, Jesús está presente a sus discípulos en el amor que los discípulos le muestran al guardar Sus mandamientos. Es el amor lo que hace que la Eucaristía sea significativa. Es el amor lo que permite al Espíritu habitar en nosotros. De hecho, esta presencia permanente de Jesús desafía nuestras expectativas. "El que me ama cumplirá mi palabra, y mi Padre lo amará, y nosotros iremos a él y haremos nuestra morada con él", dice Jesús (14:21). El amor hace que Dios esté presente para nosotros como una presencia externa e interna. De hecho, el amor ES la presencia.

3. La alternativa.Una pregunta de Judas en 14:22, pone de manifiesto lo contrario de las expectativas de Jesús de sus discípulos. Hay otra alternativa Jesús le dice a Judas: "El que no me ama, no guarda mis palabras". Anteriormente había dicho que la sección del Evangelio de Juan se mantiene unida por cuatro declaraciones sobre los FRUTOS de amar o no amar a Jesús. En este tiempo de la pandemia, si amamos a Jesús y guardamos su mandamiento se puede ver en el fruto que hemos dado. Gracias a nosotros, ¿el mundo se convirtió en un lugar más polémico o un lugar más comprensivo? Gracias a nosotros, ¿el mundo se convirtió en un lugar más amoroso o un lugar más dividido? Gracias a nosotros, ¿alguien más experimentó amor y cuidado o experimentó juicio, condena y rechazo? ¿Cuál es el fruto que hemos traído? ¿Qué dice el fruto que hemos dado sobre nuestro amor por Cristo y si hemos cumplido su palabra? El hecho es esto, que si no hemos dado los frutos de nuestro amor por Cristo, entonces nuestro amor por Cristo es una mentira. 

En estos días de la pandemia, cuando no podemos recibir a Cristo externamente en la Sagrada Comunión, la presencia permanente de Cristo está con nosotros y en nosotros. Espero que al guardar las palabras de Jesús, hayamos experimentado esa presencia, hayamos dado el fruto del amor y nos hayamos convertido en personas de amor. 
-Fr. Satish Joseph